Por: Lic. en Pedagogía Aida Cristina Oceguera González
Viendo los sucesos que nos rodean, desde el entorno donde nos desenvolvemos día a día, en la colonia, en
las ciudades, en diferentes países; mirando los noticieros dónde se proyecta
cada vez más la violencia que se alza como la marea estrellando nuestra
realidad. Hace unos días, estaba leyendo el
análisis de Lina María Crispin sobre los antivalores de la sociedad actual, es
una preocupación mundial que se viene arrastrando desde los años noventa, la preocupación
por el comportamiento del ser humano y sus consecuencias en todos los ámbitos.
En resumidas palabras "la ética y la moral", Crispin identifica tres jinetes o antivalores en el actuar del hombre que hace que se autodestruya o vaya minando este mundo: uno de ellos es la injusticia es la que se fomenta diario a la desigualdad y discriminación que sufre un grupo social frente a otro; la intolerancia la raíz dónde brotan dificultando las relaciones humanas y la falta de respeto.
Algunas de las causas señaladas
son la pérdida de la conciencia social y el descuido de la educación en las
nuevas generaciones, este es el verdadero problema en la sociedad actual en la
que vivimos, se ha descuidado muchas cosas realmente importantes, la educación
en casa es evidente que se ha vuelto ausente, la mayoría de los infantes o
adolescentes están creciendo solos, la mayoría sin orientación, bajo problemas
que en muchas ocasiones sobrepasaría hasta a un adulto; es evidente ver muy seguido que incluso se
educan bajo una poderosa herramienta de doble filo "la tecnología", padres que
están melancólicos por las añoranzas de su pasado o por lo que nunca se logro
ser, bajo muchas máscaras tecnológicas, lejanos a veces lloran con sus hijos
perdiendo el acato; niños y adolescentes que tienen un bombardeo de información
directo de la televisión, con series cargadas de antivalores, violencia,
colocando en pedestales al antagonismo,
al nefasto o al injusto; en las redes con carga elevada sexual; e infinidad de
posibilidades negativas que tiene a la mano y para rematar la situación las
actuales academias no todas se rigen por la verdadera formación basada en
dichos valores, sólo se vuelven grandes guarderías.
¿Qué es lo que está pasando
en nuestras sociedades?, bien se menciona el valor se define como estar sano y
fuerte, la cual debería volver a ser influenciada de las distintas vías de los
actuares ideales. ¿Porqué si no fuera así, qué tipo de sociedad quieres dejar?.
Muy interesante el artículo
ResponderEliminarExcelente, muy atinado!!
ResponderEliminarLa verdad es muy bueno este artículo, interesante la vista de la sociedad basándose en los problemas que van desde los inicios de vida de una persona,
ResponderEliminarEXCELENTE ARTÍCULO
Gracias¡! Mucha falta nos hace compartir las voces de los buenos constructores¡!
ResponderEliminarMuy bien agurmento, me pareció muy interesante. Ya que hace falta que alcen la voz y esta es una medida muy buena
ResponderEliminarEs un gran artículo y me gustó mucho su contenido
ResponderEliminarInteresante artículo aquí. Gracias por compartirlo.
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