Por: Lourdes Cervantes
Nican in cuicatl
Nican in ohtin
En
sus recuerdos te encontré,
y
en ellos me reconocí…
Sin
estar, te quedaste
bailando
en el corazón, de otro Serafín.
Las
estrellas que anhelo, fueron…
Ahora,
tu casa son.
Nican
in cuicatl
Nican
in ohtin
Diez
lustros de amor
bastaron
para tocar mil almas.
No
estás,
y
estás tocando la mía
en
los recuerdos de otro Serafín.
Nican
in cuicatl
Nican
in ohtin
Dedicado a Santiago Serafín ✝
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