Por: Alejandro Ruíz Robles
EL NOMBRE DEL JUEGO
/ THE NAME OF THE GAME (1977)
Por lo vivido y aprendido, siempre he
pensado que si a algo venimos a esta vida es a ser felices; entendiendo por
ello, el hecho de estar satisfecho por conseguir nuestro bienestar de manera
estable. Como tal, sabemos que la felicidad es una emoción que nace en nuestra
consciencia, nos llena el corazón y en congruencia, la mostramos con alegría como
parte de nuestra forma de ser,
sea a través de una sonrisa, una risa o
simplemente con un gesto de júbilo, es un detalle que compartido sabe mejor. ¿Cuál ha sido el momento más feliz de tu
vida?
UNO DE NOSOTROS / ONE OF US (1981)
A lo largo del día, buscamos llenarnos de
motivos que nos proporcionen alegría y tranquilidad, buscando que esta armonía
se traduzca en productividad para lo que somos y hacemos y con ello, repartirla
con quien nos rodea. Encontrar motivos que nos provoquen gozo pueden ser muy
variados; por lo cual, lejos de buscar explicaciones, ¡nos basta con
disfrutarlos!
En ese sentido, nos damos cuenta de que no
hay mayor dicha para mostrar plenitud en nuestro día a día, que ver en la
felicidad nuestro motor, o, ¿hay
otra manera en que tú manifiestes tu plenitud?
DESILUSION / DISILLUSION
(1973)
Y
justo cuando pienso que no hay nada más humano que ser feliz; me encuentro con
que muchas personas me señalan que el motivo de su felicidad tiene un origen
divino, ya sea porque una deidad se las obsequia, la permite o la encuentran al
buscar a ésta.
Ante
ello, pienso el gran trabajo que debe tener dicha divinidad ocupándose en todo
momento de nosotros; incluso, en algo tan sencillo como el hecho de pretender
que seamos felices.
Y con ello me pregunto: ¿ser feliz es mi responsabilidad o de alguien más?
DEBO REIR O LLORAR / SHOULD I LAUGH OR CRY (1982)
Para responder tal cuestionamiento,
recuerdo que el “libre albedrío”, es el poder que tienen las personas de poder
elegir y tomar sus propias decisiones.
Es decir, de acuerdo con mis clases de
filosofía, Dios dio al hombre la posibilidad de actuar según deseé, con
independencia de si tales decisiones son buenas o malas y las consecuencias que
deriven. Si en mi voluntad está la posibilidad de construir mi presente, ¿hay razón para culpar a alguien distinto a
mí por sus resultados?
De pequeños teníamos tantos motivos de
alegría que ni siquiera había tiempo para enumerarlos, bastaba escuchar la
canción de mamá, la broma de papá, el juguete encontrado o la golosina recibida
para estallar de júbilo. No recuerdo nunca que alguien me haya cuestionado a mí
o a mis amigos si mi prioridad era ser feliz, bastaba con mirar nuestra carita
para saberlo y sobre todo, a la distancia escuchar nuestras risas y bromas. Sin
duda, la alegría en todo momento arrinconaba a la tristeza y cuando ésta
emergía, duraba hasta que un distractor nos generaba otra chispa de algarabía.
En ese sentido… ¿Dónde perdimos
nuestra actitud de niño?
LA REINA DEL BAILE / DANCING QUEEN (1976)
Conforme crecimos y fuimos adquiriendo
intereses propios y objetivos comunes con nuestros amigos y compañeros,
encontramos otros motivos para ser felices. Quizás ya no eran detalles
pequeños, pero si atendían al modo en que ya veíamos la vida.
Con el surgimiento de la atracción por
otras personas, encontramos otros elementos para complementar nuestras etapas
de juventud y formas de mostrar nuestra forma de ser, tales como el baile, el
deporte, las fiestas, en fin. Motivos para ser alegre sobraban, aunque éstos
cada vez eran más complejos. La construcción de quienes somos tomó gran parte
de nuestra niñez y juventud no obstante, la madurez nos definió. Hoy es bueno
saber, ¿aún sonreímos al recordar lo que antes nos inspiraba?
MAMMA MIA (1975)
Es curioso, pero conforme nos consolidamos
como personas, nos alejamos de quienes siempre han buscado nuestro bien. Las
palabras de “mamá” y “papá,” por nuestros prejuicios las convertimos en lastres
que deben prescindirse para mostrar nuestra autonomía.
Incluso, llega el momento que basta que lo
digan quienes nos orientaron en nuestra infancia para hacer justamente lo
contrario y con ello, pretender mostrar nuestra supuesta fortaleza como
“adultos”. No obstante, si con la vida aprendemos algo es a madurar y erradicar
los caprichos; en el entendido que éstos sólo vivirán, en la medida que
pretendamos evitar la razón y vivir de nuestros impulsos. Meditando un poco, ¿los consejos de
nuestros padres son tan malos que debemos evitarlos?
MI AMOR, MI VIDA / MY
LOVE, MY LIFE (1976)
Si yo debo ser lo más importante para mí y
como consecuencia de ello, asumir el protagonismo que corresponde, ¿por qué debo conformarme con un personaje
secundario?
Si amarme a mi es mi primer compromiso con
mi persona, está de más pretender que otros lo hagan por mí; lo mismo pasa con
la felicidad. ¡la construyo a cada
momento!
Pretender que el destino de mi vida está en
un tercero, es minimizar mi responsabilidad, pero sobre todo, delegar a otros
la facultad de hacerlo.
¿Te has dado
cuenta de la trascendencia de esta frase: “¡vive para ti!!”
TENGO UN SUEÑO / I HAVE A DREAM (1979)
Cada vez que me abrumo con problemas o
realidades que afectan mi vida, cierro los ojos, las analizo, exploro mis
opciones y actúo de la mejor manera. Esto no significa que sólo viva en mi
existencia, también me da la opción de soñar con un entorno fantástico donde mi
imaginación no tenga límites.
Fantasías las tenemos todos y en mayor o menor
medida las combinamos con nuestras acciones. Una constante es llenar nuestra
vida de paz, amor y felicidad y eso nos provoca a intentar actuar en
consecuencia. La medida de nuestro compromiso sin duda será una referencia de
nuestro logro.
Y en ese entendido, si todos soñamos con un
mundo mejor en el cual haya condiciones óptimas para nuestro desarrollo, ¿qué nos lo impide para llevarlo a cabo?
LO HAGO, LO HAGO, LO HAGO, LO HAGO, LO HAGO
/ I DO, I DO, I DO, I DO, I DO (1975)
Para encontrar la felicidad no necesitas
una brújula, basta que te decidas a crearla y consolidarla con la congruencia
entre tus razones y tus acciones.
La vida siempre te sorprenderá, pero en ti
estarán los argumentos para prepararte día a día y ajustarte a las
circunstancias. Malos momentos los tenemos todos, pero está en ti definir su
tiempo de duración. No intentes prescindir de tus sueños sin haberlos
intentado. ¡Ve por ellos!
ARRIESGATE CONMIGO
/ TAKE A CHANCE ON ME (1981)
Mírate al espejo y reconócete. ¡Atrévete a ser tú, para ti!; sin
duda, si tú estás bien y te amas, podrás compartirlo y ayudar a otros.
Recuerda que nadie da lo que no tiene.
Piensa en ti y construye la felicidad que mereces. Podrás lidiar con mil y un
dificultades, pero quédate con la tranquilidad que puedes vencerlas. Además,
toma en cuenta tus enseñanzas divinas, si fuiste hecho a imagen y semejanza de
una deidad, seguro es que podrás enfrentarlas y superarlas.
Recuerda: ¡TÚ ERES MÁS GRANDE QUE TUS PROBLEMAS!
HE ESTADO ESPERANDO
POR TI / I’VE BEEN WAITING FOR YOU (1975)
Solo tú conoces toda tu historia porque tú
eres el único que la ha vivido; seguramente habrá otras personas que hayan
compartido o participado en diversos momentos, pero ellos no tienen toda la
información.
Tú y sólo tú sabes lo que has invertido en
ser tú y el esfuerzo que has puesto en ello, ¡valora lo que llevas, fortalece tus habilidades y aprovecha tus
oportunidades!
EL GANADOR TOMA
TODO / THE WINNER TAKES IT ALL (1981)
La persona que es feliz no es egoísta, por
el contrario, ¡lo disfruta y lo
comparte!
Si ya lo eres, ¡consolídalo y continúa esparciéndolo en tu entorno!
Si aún tienes dudas, ¡tómate el tiempo que requieras para ti,
decide tu actuar y cimenta el estado en que quieras vivir!
Tú eres el centro de tu mundo. ¿ESTÁS DISPUESTO A SER LUZ EN TU VIDA?
Posdata:
Escribí este texto inspirado en algunas canciones de ABBA, la banda sueca de
música pop que disfrutamos en vivo de 1972 a 1982 y queda con nosotros por
siempre. ¡Gracias por la Música!
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